Encontré los autos de papá, por supuesto en Internet.

Me ayudó mucho el saber reconocer los modelos, práctica que adquirí con mi amigo Manuel Olivé, que está considerado, hasta ahora, como el mejor miniaturista del mundo (para que tengan una idea, por realizar un modelo él cobraba $85,000.=).

El Nash está fotografiado en Manila y es la primera foto del albún de viajes de papá, así como para llevarse un recuerdo de casa.

El Packard (fotos de abajo) es un "clásico" espectacular, y este es del año anterior al de la toma de la foto, (1933) así que no me extraña que le llamara la atención y se fotografiara junto a él.

La foto de papá, por sí misma, es un espectáculo.